PERHENTIAN, MALASIA: LAS ISLAS SEMI VIRGENES

El día 5 de octubre por la noche salimos de Koh Tao en compañía de Fran y Rosy rumbo a Surat Thani en un ferry nocturno. Tras aproximadamente 7 hrs de viaje, llegamos al destino a las 4:30 am en donde tomaríamos un autobús que nos llevaría a la frontera, justo en los controles de migración Tailandeses para entrar en Malasia.

En el muelle le compramos el boleto de minivan a una Sra rumbo a Sungai Kolok por 550 THB (unos 18 usd) y esperamos hasta las 6 am aproximadamente para salir. Llegamos a Hat Yai y tuvimos que cambiar de minivan pues no resultó lo que nos habían prometido y la única manera de llegar a la ciudad fronteriza, era cambiando de transporte (afortunadamente, sí estaba incluido en el precio pagado).

Al llegar a la estación de minivans tuvimos una acalorada discusión con la gente que las operaba, puesto que no nos querían llevar por el tamaño de la maleta de Fran y Rosy. Finalmente, accedieron a llevarnos a la ciudad fronteriza de Sungai Kolok a donde llegamos tras unas 19 horas de viaje.

De  ahí, nada más pasar migración, llegamos a Kuala Besut en taxi, donde tuvimos que pernoctar, ya que no había mas ferrys a las islas Perhentian por ese día (el último sale a las 5:30 pm).

Las islas perhentian se localizan a unos pocos kilómetros de la frontera con Tailandia, en la provincia de Terrenganu en Malasia. Perhentian Besar, la isla más grande, cuenta con resorts como del tipo de luna de miel y es una isla con menos actividad que la más pequeña, Kecil, en donde se practican actividades como el buceo y el snorkel a precios muy por abajo de la mayoría de los lugares en el mundo. Esta última es la más popular para los mochileros, puesto que ofrece hospedaje más barato.

La isla Kecil tiene 2 playas principales: long beach y coral bay. En la primera se encuentran la mayoría de los hoteles y es la mejor para tomar el sol y bañarse, pues la fina arena es blanca y el mar azul. La segunda, como su nombre lo indica, tiene muchos corales, por lo que no es tan cómodo tomar el sol y bañarse en el mar, pero a cambio ofrece mejor snorkel y más tranquilidad.

Déjenme decirles una cosa: si piensan venir a las islas Perhentian, no esperen gran lujo ni comodidad, a menos que sean pacientes para buscar hotel o estén dispuestos a gastar unos 100 usd por los menos.

Así, tras recorrer todos los hoteles en long beach, decidimos hospedarnos en el Mohsin Chalet por 50 MR (unos 18 usd habitación doble) por las vistas de la playa que ofrecía y ser de los pocos que tienen wifi incluido. Esta fue, por mucho, la peor decisión que tomé, puesto que el calor y las chinches (sí, chinches en el colchón!) hicieron imposible descansar y aún ocasionaron un conflicto con el personal del hotel, con quienes casi terminé a los golpes.

Después de esta amarga experiencia nos cambiamos al hotel Shari La, un resort relativamente nuevo, con buen estándar de servicio y de instalaciones, aunque un poco descuidado, como la mayoría de las cosas en la isla. Un mundo de diferencia con el anterior.

Las actividades acuáticas que se pueden practicar en la isla hacen que valga la pena la incomodidad hasta cierto punto, pues el snorkel y los buceos me permitieron conocer una vida marina que hasta ese entonces no había tenido oportunidad de apreciar: tiburones de punta negra, tortugas, barracudas, peces ángel, peces ballesta, entre una amplia variedad.

No hay gran vida nocturna en la isla y sin embargo hay una buena atmósfera en el único bar de la playa que ofrece bebidas excesivamente caras para el estándar asiático (pero así es en gran parte de Malasia). La bebida de la isla se denomina Orang Gutan y se conoce mejor como “monkey juice”. Cada noche se reúnen los viajeros y uno que otro local a tomarse unas botellas tamaño ánfora después de un relajante día en la playa y el ambiente se presta para conocer gente que se encuentra haciendo exactamente lo mismo que tú.

En definitiva, aunque este lugar ofrece vistas paradisiacas con playas de arena blanca y mar azul de varias tonalidades que van del turquesa al verde, los servicios aún son incipientes y la actitud de los pobladores locales, así como de muchos de los extranjeros que residen en él, deja mucho que desear en mi opinión.

Los highlights de esta parada: el snorkel,el buceo y el tiempo de descanso en la playa con mis amigos Gaby, Francesc y Rosy.